PARAMETRIA

Rumbo a la elección de 2012 en México, una mujer compite por la nominación de su partido para la candidatura a la Presidencia de la República. Esto, en el único partido que aún no ha definido quién será su candidato para los comicios del año próximo.

A propósito de la posible candidatura de una mujer para la Presidencia de la República, Parametría da a conocer los resultados de su más reciente Encuesta Nacional en Vivienda.

La mayoría de los mexicanos considera que las mujeres tienen las mismas oportunidades que los hombres en política y gobierno, con un 30% que no lo cree así.

Al cuestionar sobre el liderazgo en política, el grueso de los encuestados (69%), dijo estar en desacuerdo o muy en desacuerdo con que, en general, los hombres son mejores líderes políticos de las mujeres. Sin duda, la postura refleja un avance en la concepción de equidad de género, aunque preocupa que un 27% esté de acuerdo con la postura que adjudica a los hombres mejor liderazgo político.

La encuesta de Parametría muestra que los ciudadanos creen que en puestos ejecutivos (Presidencia de la República o gubernaturas) es donde las mujeres pueden ser mejores que los hombres. Así, la Presidencia de la República ocupa el primer lugar en los puestos que, de acuerdo con los encuestados, desempeñaría mejor una mujer, le sigue el cargo de gobernador o Jefe de Gobierno con 12% y posteriormente –empatados con 8%-, senador, diputado y presidente municipal.

También es necesario considerar al 31% que no supo cuál de los cargos elegir.

Uno de los indicadores de equidad de género en la política es el porcentaje de mujeres que ocupan asientos en los congresos y parlamentos del mundo. A octubre de 2011, las mujeres ocupaban el 19.4% de los asientos de parlamentos, esto es, ocho de cada diez parlamentarios, eran hombres.

El conteo, realizado por la Inter-Parliamentary Union, muestra que es Europa –incluidos los países nórdicos- la región donde existe mayor presencia de mujeres en el parlamento, tanto con 22% (obtenido tanto de las cámaras bajas como de las altas de los países europeos), le sigue América con 21.5, África con 19.7%, Asia con 18% Pacífico con 14.8% y por último los estados árabes, con 10.5%.

En una de las clasificaciones, el organismo diferencia los países nórdicos del resto de Europa, ya que en Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia, las mujeres ocupan, en promedio, el 42.3% de las curules o escaños de cada nación.

México, comparado con otros países, se encuentra en el lugar 32 -de 136, aproximadamente-, en la clasificación mundial de porcentaje de participación de las mujeres en los congresos, con 26.2% de curules ocupadas por mujeres en la Cámara de Diputados, y 22.7% de los escaños en el Senado de la República.

Cuba ocupa el 6° lugar en la clasificación mundial y el 1° de los países latinoamericanos. Le sigue Costa Rica con el 13° y el 2°, respectivamente.

Estados Unidos, con la composición de 2010 de sus dos cámaras, tiene el lugar 69 de la clasificación mundial.

Aun cuando los números indican presencia marginal femenina en los congresos, y por ello en la hechura de leyes, los mexicanos creen que las mujeres participan (mucho o algo) en política y en la toma de decisiones del gobierno.

Apenas suman 24% quienes creen que en política las mujeres participan poco o nada, y 44% los que así lo ven en las decisiones de gobierno.

Tres de cada diez mexicanos piensan que, de llegar una mujer a la Presidencia de la República, los mandatarios de otras naciones le concederían menos importancia a sus opiniones por su género, mientras el 57% opina que la relevancia sería igual.

En general, los ciudadanos consideran que con una mujer en la Presidencia mexicana, muchos rubros mejorarían. El combate a la corrupción es el área en la que hay menos expectativa, con 33% que considera que habría poco o nulo avance con una mujer al frente de la administración pública federal.

Cuatro de cada diez encuestados (38%) están de acuerdo (en algún grado de intensidad) con que las mujeres no pueden ejercer un cargo público porque son muy emocionales; mientras que una porción similar (36%), opina que el género femenino puede ser influido más fácilmente, lo que también significaría un impedimento para ser funcionario público.

El enunciado que refleja menos opiniones a favor es el que sostiene que las mujeres no tienen la experiencia necesaria para ejercer un cargo público; en ese caso el 72% está en desacuerdo.

En México, únicamente 5 mujeres han sido candidatas a la Presidencia: Rosario Ibarra de Piedra (en 1982 y 1988), Cecilia Soto (en 1994), Marcela Lombardo (en 1994) y Patricia Mercado (en 2006), siendo esta última la que obtuvo mayor porcentaje con el 2.71% del total de la votación efectiva.[1]

Actualmente, sólo 12 países en el mundo tienen a una mujer desempeñándose como presidentas, primeras ministras o cancilleres.[2]

FUENTES:
PARAMETRÍA. Estudio: Encuesta Nacional en vivienda. Representatividad: Nacional. Número de entrevistas: 500 encuestas del 29 de octubre al 3 de noviembre de 2011. Nivel de confianza estadística: 95%. Margen de error (+/-) 4.3%. Diseño, muestreo, operativo de campo y análisis: Parametría SA de CV. Método de muestreo: Aleatorio sistemático con probabilidad proporcional al tamaño.Unidad de muestreo: Las secciones electorales reportadas por el IFE.

Inter-Parliamentary Union:Women in Parliaments, World and Regional Averages y World Classification, en: http://www.ipu.org/wmn-e/world.htmy http://www.ipu.org/wmn-e/classif.htm

Instituto Federal Electoral (IFE):Estadísticas de las elecciones federales de 2006, en: http://www.ife.org.mx/documentos/Estadisticas2006/presidentet/nac.html

Univisión:“Las mujeres presidentas en el mundo”, enero, 2011, en: http://noticias.univision.com/mundo/noticias/slideshow/2011-01-02/las-mujeres-presidentas-en-el