Este año habrá diez elecciones para Gobernador y cuatro más donde sólo se elegirán presidentes municipales y diputados locales. El presente estudio analiza algunos escenarios que presentan los estados de Oaxaca, Aguascalientes y Baja California. En Oaxaca está en juego una gubernatura, 25 diputados locales de mayoría relativa y 17 diputados locales de representación proporcional. Los aguascalentenses seleccionarán a su nuevo gobernador, a 18 diputados locales de mayoría relativa, nueve diputados locales de representación proporcional y 11 presidentes municipales. En Baja California, la contienda es por 16 diputados de mayoría relativa, 9 de representación proporcional y 5 ayuntamientos. Este análisis centra su atención en una serie de variables conformadas por resultados electorales y por estudios de opinión que pueden jugar un papel determinante en los próximos resultados de estos tres comicios locales.

Análisis histórico del estado de Oaxaca

a) Participación en el Estado

El nivel de participación indica qué tan involucrados están los ciudadanos con la política. Los niveles de participación cambian de un estado a otro dependiendo el interés de los electores en los comicios. En Oaxaca, durante las últimas elecciones federales se observó una participación pobre (alrededor de 37%). Sin embargo, cuando confrontamos dicha cifra con la registrada en 2003 en los estados donde hubo elecciones para gobernador (cerca de 60%), y cotejamos con el índice que se midió en las elecciones federales de 2000 (aproximadamente el 57%), o con la participación en la anterior elección de gobernador (51%), es probable que la participación para estas próximas elecciones se ubique alrededor de 60%.

b) Análisis electoral en el tiempo

Los resultados electorales en el tiempo señalan que el PRI es un partido que ha ido perdiendo poder político en el estado de Oaxaca. En las elecciones para Gobernador del estado, se aprecia que el PRI tuvo un descenso entre 1986 y 1992 de 12 puntos porcentuales en su votación. Sin embargo, esta caída se hizo más profunda y el Revolucionario Institucional cayó 26 puntos porcentuales de 1992 a 1998. El partido que se benefició de lo anterior, es el PRD. El Partido de la Revolución Democrática creció 28 puntos entre 1992 y 1998 llegando hasta 37% de la votación, lo cual le permitió consolidarse como la segunda fuerza electoral del estado. Durante este mismo periodo, el PAN sólo fue capaz de aumentar su votación en 5 puntos porcentuales, pasando de 5% en 1992 a 10% en 1998.

A pesar de que el PRI presenta una disminución de votos importante en las elecciones de Gobernador, los resultados del PRI relacionados con los distritos electorales federales son contundentes. En el año de 1997, el PRI ganó once distritos de los once posibles. En los comicios del 2000, el PRI consiguió diez distritos, el PAN obtuvo uno sólo y el PRD ninguno. Sin embargo, en las últimas elecciones federales el PRI volvió a ganar todos los distritos. El hecho de que el PRI haya recuperado el 100% de los distritos electorales federales, indica que es un partido vivo que tiene la capacidad de capitalizar votos a su favor. Hagamos una exploración más a fondo para demostrar lo anterior.

Análisis de encuestas del estado de Oaxaca

a) Partidos

Un de los elementos importantes para realizar el diagnóstico oaxaqueño son las encuestas. Para conocer la ubicación de los partidos en el estado, se utilizarán datos de una encuesta en vivienda realizada por Parametríaen el estado de Oaxaca durante el mes de febrero. Son dos los elementos que se explorarán: la opinión y la preferencia. Para el análisis de opinión hagamos la resta de opiniones buenas menos las malas para quedarnos conocer si el saldo es positivo o negativo. Se aprecian dos partidos con un saldo negativo. El Partido del Trabajo      (-15%) y el PVEM (-10%). Por su parte, el partido más fuerte en esta área es el PRI (25%). Esta variable que favorece al PRI –opinión– tendrá que ser considerada en el estrategia priista, ya que el más cercano competidor en este campo es el PAN (15%) y muy por debajo el PRD (4%).

Veamos ahora qué sucede con las preferencias electorales en el estado de Oaxaca. Para realizar este análisis sumemos primero la intención de voto por cada uno de los partidos. El PAN, PRD y Convergencia suman el 48% de las preferencias. El PRI, PT y el PVEM alcanzan el 54%. Si comparamos estos datos con los resultados de la medición de ambas coaliciones, se aprecia información similar a la anterior. La coalición “Todos somos Oaxaca” –PAN-PRD-Convergencia– alcanza el 48.2% de la intención de voto. La alianza PRI-PVEM-PT obtiene el 50.1%. Estos datos pueden en un principio sugerir un empate técnico. Sin embargo, al explorar más a fondo la variable de identificación partidista en el estado, se observan elementos que apuntan a una consolidación priista. El partido con más seguidores en Oaxaca es el PRI. La proporción de oaxaqueños identificados con el PRI (40%) es mucho mayor a la que simpatiza con el PAN (22%) o con el PRD (16%). Por lo que el reto de la coalición “Todos somos Oaxaca” es encontrar una manera eficiente de sumar las identificaciones partidistas de los tres partidos que conforman la alianza, ya que el PRI presenta un fuerte arraigo.

b) Candidatos

Para que un candidato logre reunir un contundente apoyo electoral debe ser conocido y contar con una opinión favorable. Generalmente, al final de las campañas electorales los aspirantes alcanzan un nivel de conocimiento entre la población alrededor de 80 puntos porcentuales. Lo que implica que los principales contendientes a la gubernatura de Oaxaca –Gabino Cué y Ulises Ruiz– deben aumentar en los próximos meses su nivel de conocimiento por lo menos en treinta puntos porcentuales. Por otra parte, los datos de Parametría sugieren la posibilidad de que una campaña negativa en contra de Gabino Cué esté teniendo impacto en los votantes del estado. Esto se observa porque el porcentaje de oaxaqueños que conocen a los contendientes Gabino Cué y a Ulises Ruíz es similar. Sin embargo, en la opinión efectiva –resta de opinión positiva menos opinión negativa– Ulises Ruiz está ocho puntos porcentuales por encima de Gabino Cué.

c) Gobierno – Gobernador

La evaluación que hacen los electores al gobierno en turno es una variable que juega un papel importante en la explicación de la intención de voto. Los datos de Parametría arrojan una primera conclusión interesante con respecto al gobierno de Oaxaca. El Gobernador José Murat cuenta con una aprobación (55%) que está por debajo de la aceptación del Presidente Vicente Fox (56%). Esto no resulta común actualmente en los estados de la República, ya que en los últimos años han habido gobernadores que en general, en su estado tienen una aprobación por encima de la del Presidente.

Si hacemos un primer diagnóstico se puede sugerir que la elección de Oaxaca va a ser una contienda competida. Sin embargo, si vamos más a fondo se aprecian elementos que indican que el PRI es un partido que está fuerte en el estado y que cuenta con más ventajas que desventajas. Las principales ventajas son: 1) el Revolucionario Institucional como partido tiene la mejor opinión de los ciudadanos en comparación con los demás organismos políticos; 2) el PRI cuenta en sus filas con el candidato más conocido y con la mejor opinión; 3) hay una cantidad significativa de votantes que se identifican con el PRI y además, 4) no se aprecia una estrategia óptima por parte de la coalición “Todos somos Oaxaca” que aglutine y sume a las distintas identificaciones partidistas. La única desventaja que el PRI enfrenta para la próxima elección es que parece que en términos de opinión pública el Gobernador José Murat no es tan bueno como algunos otros Gobernadores.

Análisis histórico del estado de Aguascalientes

a) Participación en el Estado

Una baja participación fue parte de la normalidad en las pasadas elecciones federales. Aguascalientes no fue la excepción y registró en el año 2003 un 40.4%. Este porcentaje es menor al observado en los comicios federales del año 2000 (64.7%) y menor también a la participación electoral observada en las últimas elecciones de Gobernador (66.2%). Sin embargo, si consideramos que el promedio de participación fue de casi 60% en los estados de la República donde además de Diputados Federales se eligieron Gobernadores en 2003, esperaríamos que en las próximas elecciones de Gobernador en Aguascalientes registren una participación alrededor de 60%.

b) Análisis electoral en el tiempo

Acción Nacional ha presentado en las elecciones de Gobernador una alza en sus votos de 1992 a 1998. En 1998 se convirtió en el partido que ostenta la primera fuerza política del estado. El PAN creció 33 puntos porcentuales de 1992 a 1998,  lo cual sugiere que el Acción Nacional logró capitalizar la caída priista de 36 puntos – durante 1992 y 1998–, lo que le permitió conseguir una ventaja de 15 puntos porcentuales sobre el PRI en la última elección de Gobernador. Por otra parte, en las elecciones de Diputados Federales se aprecia que el PAN tiene un mayor control de los tres distritos federales electorales del estado. En 1997, el PRI tuvo por última vez el dominio en este ámbito cuando obtuvo dos de los tres distritos electorales federales. En contraste, en el año 2000, el PAN consiguió el 100% de los distritos electorales federales y mostró una superioridad electoral contundente. Estos últimos comicios electorales federales, el PRI recuperó sólo un distrito de los tres disputados, por lo que el PAN mantuvo la superioridad en este ámbito. Es probable que esta ventaja panista sea una elemento que pueda inclinar la balanza a favor del partido blanquiazul y de su candidato a la gubernatura de Aguascalientes en las próximas elecciones para la gubernatura.

Análisis de encuestas del estado de Aguascalientes

a) Partidos

Para realizar este análisis utilizamos información de una encuesta en vivienda realizada por Consulta Mitofsky a ciudadanos que viven en Aguascalientes durante el mes de diciembre. Para un primer acercamiento, se debe mencionar que la variable relacionada con la identificación partidista de los electores juega un papel relevante. Tres de cada diez electores se consideran a sí mismos panistas y el 24% de los aguascalentenses se declaran priistas. Se aprecia que hay una proporción importante de aguascalentenses que no se identifican con ningún partido (42%). Este amplio porcentaje de votantes será objetivo de las estrategias electorales de los dos principales partidos políticos del estado.

En cuanto a la intención de voto para Gobernador de Aguascalientes, se percibe cierta ventaja para el Partido Acción Nacional. En las últimas tres mediciones de Consulta Mitofsky del año pasado se observa que el PAN encabeza las preferencias electorales. En el mes de diciembre Acción Nacional tenía el 33%. Por su parte, el PRI se ubicó en el segundo lugar con 26%, siete puntos por debajo del PAN. A pesar de la ventaja electoral del blanquiazul, es importante analizar lo que sucede con la selección de candidatos panista en el estado, porque si hay un descuido en el manejo de la elección interna, las consecuencias podrían ser negativas para Acción Nacional.

b) Candidatos

Al parecer el Partido Acción Nacional tiene problemas con la nominación de su mejor aspirante a la gubernatura del estado. Si el manejo de la selección no es adecuado, todo parece indicar que el PAN podría estar perdiendo un fuerte capital político. Veamos por qué. Una tercera parte de los aguascalentenses (29%) manifestó que le gustaría que Reynoso Femat fuera el próximo gobernador de Aguascalientes. El aspirante que le sigue en este nivel de popularidad es Ricardo Magdaleno Rodríguez (9.3%) quien está 20 puntos porcentuales por debajo de Reynoso. Esta superioridad la ha mantenido Reynoso Femat a lo largo de las últimas tres mediciones de Consulta Mitofsky. Por lo que es necesario indicar que si el PAN decide no elegir a Reynoso Femat como su aspirante a la gubernatura, es probable que este abandone el partido y se convierta por sí sólo en un contrincante con el capital político suficiente para poner en duda el triunfo panista en el Ejecutivo local.

La conclusión para el estado de Aguascalientes es que la ventaja del PAN en el estado es frágil. Electoralmente, Acción Nacional presenta dos aspectos que le podrían ayudar a mantener el gobierno del estado: 1) en las pasadas elecciones federales el PAN ganó en dos de los tres distritos electorales y 2) la proporción de aguascalentenses que se consideran panistas es mayor al porcentaje de aguascalentenses que se identifican con el PRI, por lo que podemos sugerir que esta variable – identificación partidista – es un elemento que jugará a favor del PAN en las próximas elecciones a Gobernador. Sin embargo, todo indica que los panistas tienen la opción de utilizar una estrategia montada en un candidato fuerte, o usar una táctica que apele a la identificación partidista de los aguascalentenses. Si el blanquiazul decide la segunda opción, las consecuencias pueden favorecer a la segunda fuerza electoral del estado, al PRI.

Análisis histórico del estado de Baja California

a) Participación en el Estado

Baja California es otro estado que se caracterizó por un bajo nivel de  participación electoral en las elecciones federales de 2003. Presentó una participación del 29.8%. El fenómeno de baja participación electoral que se registró en 2003 lo enfrentó todo el país y Baja California tampoco estuvo exento. Con este antecedente, es probable que Baja California cuente con una participación electoral menor al 60% en las próximas elecciones locales, ya que el estado no enfrenta comicios para renovar la gubernatura, sino que sólo se renuevan diputados locales y presidentes municipales. Es posible sugerir lo anterior porque los estados que tuvieron elecciones para gobernador el año pasado tuvieron un promedio de participación alrededor del 60%. Los estados que no tuvieron elecciones para gobernador – como ahora Baja California – tuvieron una participación menor.

b) Análisis electoral en el tiempo

En Baja California, todos los escenarios son ahora más panistas. A diferencia de la reconstrucción priista que sucedió en algunos estados del norte del país –como Chihuahua o Nuevo León–, Baja California no presenta esta tendencia favorable al PRI, al contrario. El PAN en el estado ya cuenta con una ventaja clara. En las últimas tres elecciones para Gobernador, el blanquiazul ha mantenido una ventaja aproximada de diez puntos porcentuales. Lo cual, se refleja en las elecciones de Diputados Federales. En 1997 el PRI ganó uno sólo distrito de los seis en disputa. En 2000 y 2003 el PRI no consiguió ningún distrito. El PAN obtuvo el 100% de los distritos posibles. Esto marca una ventaja evidente para las próximas elecciones locales.

Análisis de encuestas del estado de Baja California

Para el estado de Baja California no hay información disponible de encuestas para el análisis. Por tanto, se prescinde de este análisis.

Para el estado de Baja California, es difícil generar una conclusión, ya que sólo  hay datos electorales de elecciones anteriores. Sin embargo se debe considerar que el PAN presenta buena ventaja en la votación para gobernador y en las últimas tres votaciones federales.

Conclusiones generales

En el estado de Oaxaca el PRI parece ser un partido sólido y fuerte. Cuenta con una ventaja que resulta imprescindible en cualquier elección, la identificación partidista. En cambio, la alianza entre el PAN, PRD y Convergencia tiene el reto de encontrar una manera óptima de sumar las identidades partidistas que resultan tan distintas. El único elemento desfavorable para el PRI es que el Gobernador José Murat tiene una aprobación en el estado menor a la que tiene el Presidente Vicente Fox. Lo anterior sorprende porque en los últimos años ha habido una buena generación de gobernadores que presentan una alta aceptación en sus estados.

Por otra parte, en el estado de Aguascalientes se aprecia que en el PAN existe un problema de decisión. El PAN debe elegir entre montar su próxima campaña en un candidato popular –Reynoso Femat– o realizar una estrategia que apele a la identidad partidista de los aguascalentenses panistas. Esta segunda opción puede ser riesgosa para Acción Nacional debido a que Reynoso Femat tiene el suficiente capital político para competir con otras siglas distintas y poner en aprietos al blanquiazul. Si esto sucede el principal beneficiado sería el PRI, que actualmente es la segunda fuerza electoral.

Baja California se ha convertido con el paso del tiempo en un estado cada vez más panista en todos sus niveles. El PRI no ha logrado reconstruir en este estado del norte del país su capital político como lo ha conseguido en estados como Nuevo León o Chihuahua. Con la información disponible, es probable que la ola azul siga creciendo en el estado o por lo menos que no pierda lo que ha ganado en los últimos años.