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Fisonomía México

La fisonomía de los que eligen en México

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El PVEM logra votos entre los menos escolarizados

El PRI se recupera entre los jóvenes

Los de mayor edad prefieren al blanquiazul

El domingo 6 de julio no a todos los electores interesó la elección, tan sólo cuatro de cada diez empadronados (41%) estuvieron convencidos de acudir a las urnas para determinar la composición partidista del legislativo federal. El examen de este proceso electoral 2003 inicia por conocer las características de los electores que acudieron a las urnas. La Encuesta de Salida de Parametría del día domingo resulta valiosa en tal propósito.

Diferencias entre hombres y mujeres

Cuando analizamos el voto del PRI por género notamos que tal instituto recibe cinco puntos porcentuales de mayor apoyo del segmento de las mujeres (41%) comparado con su votación promedio registrada en la encuesta (36%). Mientras que el PAN recibe seis puntos menos de apoyo en el segmento femenino (26%) también con respecto de su propio promedio obtenido (32%). En el caso de los demás partido no hay grandes diferencias considerando el género.

La edad hace votar distinto a las personas

De acuerdo con los datos obtenidos por Parametría existen diferencias en el voto de acuerdo con la edad. El PRI recibe ocho puntos más de apoyo de los electores entre los 36 y 45 años (44%) y tres puntos más de quienes están entre los 18 y 25 años (39%) respecto de su promedio. Para el caso del PAN distinguimos que a menor edad disminuye la propensión a preferirlo. En el caso del PRD en el bloque de las personas de más de 56 años (24%) el apoyo fue cuatro puntos mayor que su promedio (20%). Por su parte, el PVEM tiene su segmento electoral entre los jóvenes de 26 a 35 años (11%) donde registra cinco puntos más de preferencia arriba de su promedio (6%).

¿La escolaridad hace diferencia?

La intención de voto por el PAN crece a medida que aumenta la escolaridad. Caso contrario el PRI, que a menor escolaridad mayor es el voto. La lectura para el PRD no es lineal como en los casos anteriores. El amarillo con negro cosechó sus votos entre las personas con primaria y preparatoria quienes le dieron entre dos y seis puntos más de apoyo que el resto de sus electores. Lo que encontramos con asombro en esta jornada es que el PVEM consiguió 17 puntos porcentuales más entre las personas con menor escolaridad (23%) con respecto de su promedio (6%) lo que quizá vendría a explicar su proporción mayor a 5% obtenida en los distritos donde compitió sin coaligarse.

Los partidos y sus electores

De las observaciones anteriores podemos concluir que el semblante del elector para el 2003 trae algunos cambios mientras otras cosas se mantienen constantes. De las constantes tenemos que el votante panista sigue siendo escolarizado; que el priista es poco escolarizado y predominantemente femenino; mientras que el perredista es un elector adulto masculino medianamente escolarizado. De los cambios advertimos que el PVEM ha ganado la simpatía de una quinta parte de los electores sin escolaridad y que el PRI recupera puntos entre los jóvenes que había perdido con Fox en 2000.

 

NOTA METODOLÓGICA:Resultados de la encuesta de salida del domingo 6 de julio de 2003 de Parametría SA de CV. Se consideraron 200 secciones electorales en el país como muestra y se levantaron 7,160 encuestas.

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